La resistencia a drogas antimicrobianas adquirida por los patógenos es un problema importante para la salud humana. La rapidez con la cual se pierde la efectividad en los tratamientos con antibióticos y la acumulación de cepas infecciosas multi-resistentes constituyen amenazas crecientes en todo el mundo.
El grupo del doctor Eduardo Ceccarelli investiga sobre nuevas estrategias para el desarrollo de drogas específicas, y se focaliza en el estudio de enzimas, transportadores de electrones y complejos proteicos que son esenciales para la sobrevida de varios patógenos microbianos, como la Leptospira interrogans.
Esta bacteria provoca la enfermedad conocida como leptospirosis, que al comienzo produce síntomas similares a la gripe o malestares musculares, pero en los casos más severos puede desencadenar hemorragias masivas -la pulmonar es la más frecuente- y causar hemoptisis súbita fatal.
La transmisión de las leptospiras se produce a través del contacto directo con animales infectados o por exposición a aguas contaminadas con la orina de los mismos. El patógeno es capaz de sobrevivir en suelos húmedos y en agua por largos períodos de tiempo.
El tratamiento apropiado de la leptospirosis en humanos y animales todavía no se encuentra adecuadamente definido y como resultado, el número de muertes por esta infección es considerable. Por este motivo, resultan necesarios nuevos blancos para el desarrollo de antibióticos.
Previamente, el grupo propuso algunas rutas metabólicas que involucran transferencias de electrones (rutas redox) que podrían proporcionar estrategias prometedoras en la lucha contra patógenos.
La investigación en estas vías podría generar nuevas perspectivas en el diseño racional de drogas para combatir enfermedades infecciosas, dado que algunas dependen del poder reductor provisto por enzimas específicas.
Recientemente, el grupo reveló un paso fundamental de la vía de degradación del grupo hemo (presente en los glóbulos rojos y encargado de transportar oxígeno) en L. interrogans, contribuyendo al entendimiento de esta importante ruta metabólica. El hallazgo se publicó en la revista Biochimica et Biophysca Acta (BBA).
Teniendo en cuenta que el hierro es requerido para la sobrevida e infectividad del patógeno, la vía de degradación del hemo resulta relevante para futuras aplicaciones terapéuticas.